A un costado de la cancha de entrenamiento del Complejo Deportivo de Club Magallanes vemos a un jugador sentado, pensativo, contemplando una práctica de fútbol. Es el Nico Núñez, capitán del equipo desde hace un año. Seguramente esté pensando en la estrategia, en cómo llevar a él y al resto de compañeros al mejor nivel. Y es que el Nico ya es entrenador, todavía no ejerce pero desde este año ya cuenta con el título de Director Técnico.
Núñez lleva este deporte en la sangre, es de esos que se levantan pensando en fútbol y se acuestan pensando fútbol. Comenzó en esto muy chico, por el año 97 llegó a Universidad Católica, a la sub 13, con el profe “Arica” Hurtado y de ahí no paró más,
“lo recuerdo como una etapa muy linda, en la formación y en los recuerdos que tengo del fútbol”, cuenta. “Es una etapa en la que uno no tiene muchas preocupaciones y lo único que haces es jugar”.
Además, Nico también recuerda otros momentos muy importantes de su vida como futbolista, “recuerdo el campeonato del 2005 con la Universidad Católica y el campeonato del 2012 que obtuvimos con Huachipato. En la Católica en 2005 éramos bastantes jugadores formados en el club y el de Huachipato porque era la segunda vez en la historia que era un campeonato para la institución y por el cariño y la complicidad que se generó con la hinchada”, señala.
Aquí, a Club Magallanes llegó hace tres años, proveniente de San Marcos Arica, “fue la mejor decisión. Lo pensé en conjunto con mi familia y además de por lo deportivo, por comenzar a estudiar la carrera de entrenador. Estoy muy contento acá y me siento muy querido”.
Esa carrera de entrenador de momento está en “stand by”, ahora prioriza su carrera como jugador, pero el bichito de estudiar para técnico le picó porque “me di cuenta de la influencia que tienen los entrenadores en la etapa formativa de los jugadores y eso me fue apasionando, el enseñar mi visión o lo que yo rescato de este deporte, además de transmitir valores de trabajo en equipo, de generosidad…”, asegura.
Entre sus referentes, el capitán se queda con Pep Guardiola, “lo sigo desde hace bastante tiempo ya y lo admiro en su forma de jugar y además en su forma de vida. Es un tipo bien culto, bien preparado, todos los desafíos que afronta los afronta con conocimiento, que obviamente lo mantiene en el primer nivel. Para mí es el mejor”.
“Para mí un entrenador marca demasiado sobre todo en la parte formativa, de cómo uno va descubriendo las claves de este juego y lo que le apasiona. A mí me enseñaron a eso y estoy agradecido, por eso seguí esa tendencia y es la que más me gusta”, añade Nico.
Preguntado sobre si le gustaría dirigir algún día a Magallanes, no tiene dudas, “¡por supuesto!. Uno como jugador trata también de ir traspasando conocimiento o la estrategia a los mismos compañeros, pero sí que me gustaría ser un entrenador, primero partiendo con la etapa formativa y claramente que en algún momento me gustaría dirigir acá, porque me he sentido muy querido como jugador y me gustaría también retribuir y que este club pueda tener algún logro”.